Sobre la banda oriental del Río de la Plata, existe un tradicional fenómeno meteorológico, conocido  como el “nortazo” que como bien se puede inferir, es nada más ni nada menos que un viento proveniente del sector norte caracterizado por su pródiga  energía, abundante velocidad y molestas consecuencias.

Por Lic. Alejandro Stero Sellares  – Capitán de Ultramar

En el puerto de Colonia del Sacramento, este veloz movimiento del aire se ha hecho célebre poniendo en jaque a los barcos del puerto deportivo, complicando con su brío las condiciones apacibles que tiene el lugar.

En cierta oportunidad se encontraba amarrado uno de esos veleros de regata ágil y extremadamente liviano que ante semejante fenómeno natural, pedía a gritos el refuerzo de sus cabos de popa tomados a la boya y su proa a pocos centímetros del muelle de atraque. En el mismísimo instante en que aflojaron los cabos de popa una racha del viento norte actuado sobre su obra muerta empujó con violencia la nave, iniciando un movimiento de avance hacia al muelle rompiendo parte de su roda.
Haciendo un pequeño análisis de la dinámica aplicada solamente a su arboladura y considerando el tamaño de su palo mayor, cuyas dimensiones son de unos veinte centímetros de diámetro promedio por una altura de 15 metros, se entiende que solamente el palo ofrece una superficie expuesta de tres metros cuadrados

Aunque parece poco, estos tres metros cuadrados contribuyeron a provocar la avería.

Estos relatos otorgan la idea de analizar, pensar y crear un par de cuestiones para aplicar en la total ponderación de las fuerzas del viento que actúan en las superficies del barco.

El ejemplo de ponerse de pie a bordo de un pequeño bote genera de inmediato un movimiento hacia sotavento provocado simplemente por la superficie expuesta del tripulante, de lo cual se puede ensayar un cálculo aproximado: Considerando una persona que mide 1,80 mts de altura por un ancho promedio de 0,5 mts, estará representada una especie de vela humana de 0,90 m² de superficie.

Sobre la borda de barlovento de todo buen yate corriendo una regata se ubica la parte de la tripulación que en cierto momento no tiene tarea específica alguna, con la lógica intención de compensar los pesos de la nave para disminuir la natural escora que el viento sobre la arboladura y el velamen provocan…pero

Los vientos de ceñida que llegan relativos a la amura de barlovento actúan sobre la superficie de los tripulantes sentados en la borda y que están ofreciendo una resistencia al avance del barco. Si una persona parada, como la del bote mencionado, ofrece una superficie de 0,90 m² de resistencia, los que están sentados exponen la mitad, o sea 0,45 m² y para hacer números redondos, dieciséis tripulantes son más 7,0 m² de oposición a la…regata.

Existen fórmulas para realizar estos cálculos pero en la intención de no producir perturbaciones matemáticas… se posponen para una oportunidad próxima, pero bien se puede hacer uso de un ejemplo donde estas resistencias sean apenas del orden del uno por mil (0,001).

Equivalencia entre Nudos y Metros por cada segundo

Ganando por una cabeza…

El uno por mil…en una regata de cien millas navegada a diez nudos se tardaría 10 horas en recorrer esa distancia (10 horas x 60 = 600 minutos o 36.000 segundos).

Si la velocidad desarrollada gracias a la disminución de las superficies de frenado, fuera uno por mil (1/1000) mayor, se tardaría 36.000 x 0.001 = 36 segundos menos, tiempo más que suficiente para ganar una regata. Siguiendo con el ejemplo de los diez nudos de velocidad, ahorrar 36 segundos equivale haber avanzado unos 36 seg x  5.15 metros /segundo = 185.4 metros que es aproximadamente un décimo de milla.

Si acostar a los tripulantes de la banda de barlovento significa ganar 36 segundos en una regata, resulta una buena táctica que duerman una siesta a lo largo de la borda…

Aunque hay otras propuestas más osadas…

Todo aerodinámico 

 Los nadadores utilizan trajes de deslizamiento, las camisetas de rugby son tan entalladas como pegadas al cuerpo, los ciclistas se depilan las piernas y usan cascos con diseño aerodinámico…por algo será.

Fuente: Comunidad Náutica